Carta a la guerrera de Mamá - #CartasParadejarHuella

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Hace mucho tiempo, quería preparar un post dedicado para mi mamá, no lo hice pues ya hace varios meses venimos batallando con ella una enfermedad que mil veces maldije, el cáncer, no tenía aún el coraje para contárselos, hoy después de haber ganado una primera batalla junto con ella, puedo contarles pues ya lo mas difícil paso, aún queda mucho por batallar, pero lo más duro ya paso.

A veces nos podemos llenar la vida de preocupaciones, amargarnos, llenarnos de envidia o rencores, por cosas tan insignificantes, no valoramos cuanto realmente tenemos en frente, todos los días Dios nos regala cosas, oportunidades, que pasan frente nuestro, y a veces no nos damos cuenta, la vida es muy frágil y puede acabarse en cualquier momento. Debemos aprovecharla realmente y tratar de ser mas positivos, menos quejas y vivir mirando las cosas realmente hermosas que nos regala la vida, que a veces esta en los pequeños detalles.

El cáncer es una enfermedad que se puede combatir, y evitar si es que tienes un chequeo anual EXIGENTE, una de las cosas mas dolorosas que deja con su paso, son las heridas emocionales, pero mirando el lado positivo sólo hace mas fuerte a las personas que batallan día a día esta enfermedad.

Hace tres meses, En lugar de escribir un post le hice una carta y se la entregué, ella la quiso impresa en su dormitorio para leerla siempre. Aquí se las compartimos, y digo compartimos por qué ella también quiere que la publiqué y que algún día cuando sus nietos Marcelo y Leonardo empiecen a leer, la puedan ver y conocer un poco mas del amor de su abuelita y mamá.

Carta a la guerrera de Mamá

No conocí a nadie tan bueno y tan guerrero como tú, todo lo que has querido lo has conseguido a base de mucho esfuerzo y dedicación, mami, realmente Dios me ha dado la mejor madre, siempre fuiste mas madre que cualquier rol que has tenido en tu vida, das todo por tus hijas, no alcanza una vida para agradecerte todo lo que haces… cada vez que me dices gracias hijita por algo, siento que nada de lo que pueda darte se va comparar con todo lo que tu me has dado y das.

Aún recuerdo mis cartas de amor, desde que aprendí a escribir, te enviaba mis notitas de amor diciéndote siempre lo mucho que te amaba, que no te haría renegar, ¿las recuerdas? ¿hace mucho que no te escribía no? Creo que desde los nueve años no te escribo algo tan dulce, en mi adolescencia fuí muy rebelde y aprendí a darte la contra, muchas veces me alejé de ti, pero mi amor nunca se extinguiría, porque lo que tu sembraste en mi corazón es mas grande que cualquier cosa.

Aún recuerdo cuando me cantabas el pericotito o me contabas los cuentos del ¡pericotito tufitufitufi tufitufita!, hoy con Marcelo y Leonardo lo recuerdo aún mas cuando les cantas y los encantas. El amor que tienes para dar es tan pero tan grande, que quisiera ser como tú mami, quiero que mis bebés vean en mi a una súper mamá, como tú. Me has puesto una barrera muy alta, pero sé que tengo a la mejor maestra de mamá y que puedo lograrlo.

Mami, una vida siempre será corta para agradecerte todo lo que haces, ni la mas duras de las pruebas te hacen decaer, sólo me sigues enseñando que tu fortaleza viene del corazón, puedes levantar al mas decaído pese que tu no estés con fuerzas, usando tus propias palabras en momentos difíciles, hija vas a ver que voy a salir bailando rumba de esta batalla, ¿y sabes? Te imagino siempre bailando de felicidad con esos ojitos chiquitos y coquetones bailando el ¡yerberito de la sonora matancera!, te imagino paseando con tu nieta en la playa, las dos con sus lentes de sol, te imagino el día que iba a dar a luz, dándome fuerzas y rezando conmigo antes de entrar a sala de operaciones, pese que en esa época esa fatal enfermedad ya te tenía muy adolorida, te imagino dándome muchos besitos y abrazarnos empalagosamente, como cuando era una niña, te imagino celebrando mis quince años, como si fueran los tuyos, te imagino riendo y saltando en Villa Coca-Punta Rocas, como siempre.

Mami como alguna vez lo hablamos, sólo Dios sabe cuándo nos iremos, estoy segura que él debe querer llevarte al cielo por qué realmente eres una santa en vida, estoy segura que tu ya te ganaste el cielo, quisiera que la inmortalidad exista para siempre estar juntas, quisiera tenerte a mi lado para bailar rumba por siempre, gracias a tu herencia tengo mellizos y ellos me hacen tan feliz como tu siempre has hecho conmigo.

Mami me dijiste que hay que prepararnos para todo en esta batalla de la vida, no suena bonito, no, nunca me voy a sentir preparada para lo peor, pero voy a estar batallando contigo siempre, como dijo Bolognesi, no me rendiré hasta quemar el último cartucho y por qué la batalla no terminará hasta que nos demos por vencidas!!

La despedida de esta cartita es como todas noches, sueña con los angelitos y con las maripositas de miiiiiiiles de colores

Te amo mami

Tu guerrera Yaz