La Educación en el Perú ¿Hacia donde vamos? Parte 2

La educación en el Perú ¿hacia donde vamos?

REPEAT AFTER ME

Una conversación con León Trahtemberg dividida en dos partes, la educación tradicional versus una propuesta de educación DIFERENTE, la del colegio Áleph.

Aquí la segunda parte de esta entrevista con León Trahtemberg. Si te perdiste la primera parte de la entrevista puedes leerla y verla haciendo clic aquí

Esta preocupación por la educación ha hecho que indague sobre este tema en profundidad, que me sumerja a conversar acerca de las diversas experiencias en colegios limeños y en el interior del país, conversar con docentes y me den su punto de vista, gracias a ello conocí la Casa Amarilla, conocí la metodología Reggio Emilia, de pronto por el blog me invitaban a una conferencia acerca de los Retos de la educación moderna, salí fascinada… me estaban hablando a mi! Había encontrado la educación que quería para mis mellizos… pero tenía que indagar más y sobre todo para contarles a ustedes que seguramente tienen las mismas preguntas y preocupaciones que nosotros con sus pequeños, futuros estudiantes.

La propuesta del Áleph ¿Cómo trabajan los docentes con los alumnos? ¿Por medio de libros? ¿O por medio de fichas que el docente desarrolla clase a clase?

Por definición el libro es una obra académica realizada por un autor “x” que está fuera del aula cuyos alumnos no conoce, acerca de lo que ellos tienen que hacer en el aula.

Eso no se condice con la idea de que el profesor va gestando en el aula día a día las actividades y estrategias pertinentes a partir de lo que motiva a sus alumnos… o las que el profesor detecta como necesarias de ser introducidas a la clase porque encontró que hay una debilidad o vacío por atender.

En Áleph los profesores tienen libros y textos escolares como fuente de consulta para informarse de un tema, inspirarse en ejercicios y problemas ya existentes, pero es el profesor quien elige cuáles usará y en qué momento los introducirá, sin seguir el orden que impone el autor del libro. El profesor que llega con el libro a la clase y pide a los alumnos que “abran la página 5 y hagan los ejercicios del 2 al 7…” etc. está ignorando la necesidad de atender a los diversos grupos de alumnos con las actividades que son las más propicias para cada uno en función de sus antecedentes.

Pero los libros escolares son diseñados para grandes masas de un público objetivo.

Sí, pero para un público imaginario, que se asume como uniforme, por lo que es un mismo libro y secuencia para todos. Se trabaja bajo la presunción de que todos aprenden igual, entienden igual, se motivan con lo mismo, y que por lo tanto el mismo material funciona igual para todos. No digo que sea malo tener textos escolares para quien le acomoda eso. Yo personalmente asesoro a una editorial que procura hacer libros pertinentes para facilitar el desarrollo de las clases. Lo que digo es que primero tiene que definirse la metodología de trabajo y luego decidir si se usará un texto escolar o no y bajo qué modalidades y estrategias.

¿Qué hace un docente para incentivar a un niño que no tiene habilidad numérica pero sí la artística?

Cuando tú individualizas el aprendizaje se facilitan las cosas porque no tienes que hacer que todos aprendan lo mismo, al mismo ritmo, con el mismo nivel de logro, como en una clase tradicional. Si divides a los alumnos en grupos o subgrupos y además diversificas las actividades, entonces puedes atender al niño que tuvo problemas con los números de manera diferenciada respecto al resto.

Súmale a eso la convicción de que no todos los niños van a llegar a un mismo nivel de comprensión y complejidad en cada tema, lo que no quiere decir que el alumno esté mal. Siempre habrá diferencias entre niños y hay que saber respetarlas. No es solo un niño con Síndrome de Down el que requiere que se le adapte el currículo. Son todos los niños que tienen alguna dificultad en su aprendizaje y también los más talentosos. Por eso es que los profesores deben comportarse como profesionales de la educación, y no como simples técnicos que aplican una fórmula y estándares iguales para todos.

Cuando se trata un tema el profesor tiene que ver en qué nivel de complejidad ubica a cada alumno. Por ejemplo en segundo grado podría tener alumnos que solo pueden sumar y restar números enteros, pero también podrías tener algunos alumnos que ya están empezando a entender las fracciones. No se quedan en sumar manzanas. Pueden dividirlas en fracciones y luego sumar esas fracciones (mitades, cuartos). Esos alumnos están alcanzando un nivel de complejidad mucho mayor que los otros, dentro del capítulo de sumas y restas, lo que es perfectamente razonable y no tiene porqué traducirse en que unos aprueban y otros desaprueban.

Y ahí se trabaja mucho la autoestima. ¿no?

Ese es un problema serio que trae el uso de las notas.

Cuando pongo notas jerarquizo, pongo a unos arriba y otros abajo, unos son los buenos y otros los malos. Eso estigmatiza a los alumnos.

Los más bajos se sienten heridos porque lo traducen como si fuera un mensaje que los califica de brutos por no entender, pese a que el origen de su dificultad puede no tener nada que ver con su habilidad o inteligencia. Puede deberse simplemente a un mal vínculo con la profesora que no es capaz de crear una ruta para que el alumno entienda y aprenda, o a una historia de maestras en grados previos con las que no se pudo entender.

Hay alumnos que le agarran odio a la matemáticas desde el segundo de primaria y con eso ya se sienten condenados para el futuro a no estudiar carreras intensivas en matemáticas como ingeniería, arquitectura, economía, etc. cuando su dificultad no tiene por qué tener ningún valor predictivo de su vocación. Estos estereotipos son propios de una educación que descalifica a los niños desde el primer grado como incompetentes, por no hacer lo que el docente espera. Es más, desde inicial, cuando el profesor le dice al niño no se salga de la línea o se limite a reproducir los modelos que el profesor o el libro le proponen, ya le están instalando en su mente el mensaje de que si no lo logra es un incompetente, inmaduro, (y que necesita terapia, clases particulares, etc.)

Como uno puede decir que ama a su colegio, que le encanta, que lo disfruta, cuando en todo momento lo están limitando, lo están calificando, lo están descalificando.

La filosofía de Reggio Emilia. ¿Se complementa con el Áleph?

Nosotros somos 3 promotores. Las otras dos promotoras del colegio Áleph Fiorella de Ferrari y Marisol Bellatín también son promotoras de los nidos La Casa Amarilla que se inspiran en la filosofía de Reggio Emilia. Nos hemos juntado para hacer este colegio. Ellas traen todo el conocimiento, experiencia previa y el vínculo con las familias que están en La Casa Amarilla. Nos hemos juntado porque coincidimos en nuestras visiones, ideas educativas, lineamientos de cómo se debe trabajar en la educación primaria y secundaria. Entonces la propuesta de Reggio Emilia que se gestó en Italia solamente para educación inicial, nosotros le hemos dado la forma para continuarla en primaria y secundaria. Para ello complementamos esos conceptos con lo que conocemos que tiene éxito en otros países como Finlandia, Australia, Canadá, Israel y Estados Unidos.

Innova Schools ¿De qué se trata este proyecto?

Yo soy un invitado al directorio de Innova Schools que mes a mes va viendo el desarrollo del proyecto. Hay que entender que esta es una propuesta para ser una red nacional de 70 colegios con el respaldo del grupo Interbank. Innova nace para ofrecer a la clase media que paga entre 400 y 500 soles mensuales una alternativa de alta tecnología, con un diseño curricular propio y un sistema de capacitación de docentes de un modelo que han desarrollado con la asesoría de una empresa norteamericana llamada “Ideo”. Para el público al que se dirigen, que está acostumbrado a asistir a colegios pequeños, sin áreas verdes, sin tecnología, con una infraestructura frágil y una educación muy tradicional, Innova les ofrece un gran salto hacia arriba. Les dice a los padres “oigan, por la misma plata podemos hacer algo sustancialmente mejor, con buena infraestructura, computadoras, tecnología, acceso internet, área deportivas, una propuesta curricular potente y con estudiantes que pueda aprender muy por encima de lo que normalmente se aprende”.

En mi opinión Innova Schools ha logrado su objetivo y les ha movido el piso a todos los colegios de ese segmento BC que lo están tomando como referente.

Innova ha puesto un benchmark para toda esta población de familias emergentes, de clase media, para quienes Innova es la mejor opción. Personalmente estoy contento con estar ligado de alguna manera a esa propuesta educativa, y colaboro con ella en lo que puedo. Además, su conductor Jorge Yzusqui me merece toda confianza.

¿Entonces podríamos decir que es una propuesta tradicional mejorada?

Yo no diría que es tradicional, que es una palabra muy gastada y multidimensional. Lo que diría es que ellos están haciendo un abordaje pedagógico y curricular que trata de integrar los cursos con los proyectos y la tecnología moderna, gestando una relación más personalizada con los alumnos. Diría que es un paso adelante frente a la educación convencional-tradicional, con una serie de actividades que denotan una dinámica pedagógica mucho más propia del siglo XXI que la del siglo pasado.

No se puede comparar un modelo como Innova creado para atender a 100 mil alumnos de clase media en 70 colegios, con colegios únicos como el Áleph cuyo objetivo es otro, ya que pretendemos convertirnos en un fuerte referente para los padres de familia de los niveles socioeconómicos AB ansiosos de embarcarse en una propuesta pedagógica de vanguardia que esperamos se convierta en uno de los principales referentes para la innovación educativa latinoamericana.

Tenemos enfoques curriculares, metodológicos y normas pedagógicas cotidianas diferentes en cuanto a estándares, exámenes, tareas, horario, etc. Sin embargo, Áleph e Innova tienen en común el impulso hacia la innovación y la calidad de la educación, cada cual en la realidad en la que eligió actuar, cada cual con las familias que ven en el colegio elegido la atención a sus expectativas educativas concordantes con sus capacidades económicas.

Mira aquí un resumen de está buenísima entrevista: